La historia de nuestro pueblo Mapuche se ha desarrollado en ambos lados de la Cordillera, por cuanto, por tiempos inmemoriales, nuestros antepasados cruzaron la cordillera de forma permanente y en todo tiempo, estableciendo rutas por determinados pasos, según si viajaban solos o con animales.
Hoy, aunque hemos sido separados por las fronteras de los winkas, nos orgullecemos de tener parientes tanto en Argentina como en Chile. La patria mapuche vive, sólo está dormida.
Nuestra intención es recopilar los hechos heroicos más notables de la lucha de nuestro pueblo, para escribir nosotros la historia como corresponde. Iremos incorporando cada vez más documentos y solicitamos la cooperación de todos los peñis (tanto del lado argentino como del lado chileno), y en el caso de errores, solicitamos nos escriban y nos indiquen cuáles son, mencionando la fuente, para efectuar las correspondientes correcciones.
viernes, 30 de abril de 2010
Religion de los mapuches
La visión religiosa del pueblo mapuche se basaba en la existencia de un mundo poblado de espíritus y dioses. Sin embargo, este politeísmo se resumía bajo la existencia de un ser todopoderoso, creador de todas las especies vivas, llamado Pillán o Neguechén, quien habitaba en las alturas celestiales y tenía la facultad de conceder la vida y la muerte. A esta deidad se asociaban manifestaciones de la naturaleza, como los truenos, el fuego, las erupciones volcánicas y los sismos.
Asimismo, practicaban el culto a los tótemes, entre los que se puede mencionar el cielo (huenu), el sol (antü), el mar (lavquen), el río (lenfu), la piedra (cura) y el agua (co). Cada tribu invocaba a su totem respectivo, cuyo nombre era utilizado en los apellidos y del cual descendía de acuerdo a la alianza entre el Pillán y el tótem.
Cuando fallecía un mapuche, su cadáver era ahumado, para conservarlo y velarlo durante varios días. El pesar provocado por la muerte era demostrado con gran dolor, y cuando el nombre del difunto ya no era pronunciado, se lo enterraba vestido con sus mejores ropas y provisto de alimentos, chicha, adornos y armas. Luego de cubrir el cuerpo con tierra, los familiares consultaban al adivino o dunguve, para identificar quién era el responsable de la muerte y así cobrar venganza. Si no eran compensados satisfactoriamente, atacaban al presunto culpable con el fin de matarlo.
Asimismo, practicaban el culto a los tótemes, entre los que se puede mencionar el cielo (huenu), el sol (antü), el mar (lavquen), el río (lenfu), la piedra (cura) y el agua (co). Cada tribu invocaba a su totem respectivo, cuyo nombre era utilizado en los apellidos y del cual descendía de acuerdo a la alianza entre el Pillán y el tótem.
Cuando fallecía un mapuche, su cadáver era ahumado, para conservarlo y velarlo durante varios días. El pesar provocado por la muerte era demostrado con gran dolor, y cuando el nombre del difunto ya no era pronunciado, se lo enterraba vestido con sus mejores ropas y provisto de alimentos, chicha, adornos y armas. Luego de cubrir el cuerpo con tierra, los familiares consultaban al adivino o dunguve, para identificar quién era el responsable de la muerte y así cobrar venganza. Si no eran compensados satisfactoriamente, atacaban al presunto culpable con el fin de matarlo.
Plateria Mapuche.
La platería es una de las manifestaciones culturales que mejor representa al pueblo Mapuche, todo su mundo simbólico se expresa en las formas, en los grabados de las planchas de plata, en las figuraciones y en el uso que le dan a las joyas. Durante el período prehispánico los mapuche conocían el uso de los metales, y fabricaban adornos de cobre y muy probablemente de oro y plata.
Después de la conquista española y hasta el siglo XIX, los Mapuche obtuvieron la plata del comercio con los españoles. A cambio de sus manufacturas o de ganado recibían monedas de plata que utilizaban como materia prima en la orfebrería. Su destacada labor en este arte sirvió al nutrido intercambio comercial con otros grupos indígenas y con el blanco. Cuando en el siglo XIX, la sociedad Mapuche de las pampas sufrió una notable diferenciación social y económica , la acumulación de objetos de plata fue signo de riqueza y prestigio.
"Los plateros hacían pequeños crisoles de piedra ücu y los templaban en el fuego. Adentro de esos vasos se echaban puñados de pesos y chauchas de plata y los asentaban sobre el carbón encendido de la forja. Además aplicaban el fuelle, por medio del cual atizaban las brazas alrededor del crisol lleno de plata.El vaso se acaloraba hasta ponerse candente y la plata del crisol se fundía. también arreglaban un cajoncito que contenía arena. Esa arena era el material para modelar. No se que ingrediente le agregarían para dar consistencia a la arena. en ella modelaban cualquier artefacto que querían fabricar. En la arena se imprimía la forma modelo, se tapaba el cajón y por un orificio vertían la plata derretida. Cuando calculaban que se hubiera enfriado, desmontaban el cajón y aparecía la plata cuajada, teniendo la misma forma que el modelo. Lo quitaban del molde y lo perfeccionaban con lima y martillo sobre el yunque."
Pascual Coña "Memorias de un Cacique Mapuche"
"Pero todos los hombres ponían su orgullo en el arreglo de sus cabalgaduras. Tenían espuelas y estribos de plata y adornos de plata en las acciones; además cabezadas ataviadas de plata, provistas de colgantes del mismo metal. También tenían incrustaciones de plata en las barbadas y adornados los bocados en ambos lados con unos discos de plata. Las riendas eran targeadas con plata. Así relumbraban sus caballos cuando se dirigían a sus reuniones festivas. Todos estos adornos eran obra de los joyeros indígenas.)"
Pascual Coña "Memorias de un Cacique Mapuche" .
Después de la conquista española y hasta el siglo XIX, los Mapuche obtuvieron la plata del comercio con los españoles. A cambio de sus manufacturas o de ganado recibían monedas de plata que utilizaban como materia prima en la orfebrería. Su destacada labor en este arte sirvió al nutrido intercambio comercial con otros grupos indígenas y con el blanco. Cuando en el siglo XIX, la sociedad Mapuche de las pampas sufrió una notable diferenciación social y económica , la acumulación de objetos de plata fue signo de riqueza y prestigio.
"Los plateros hacían pequeños crisoles de piedra ücu y los templaban en el fuego. Adentro de esos vasos se echaban puñados de pesos y chauchas de plata y los asentaban sobre el carbón encendido de la forja. Además aplicaban el fuelle, por medio del cual atizaban las brazas alrededor del crisol lleno de plata.El vaso se acaloraba hasta ponerse candente y la plata del crisol se fundía. también arreglaban un cajoncito que contenía arena. Esa arena era el material para modelar. No se que ingrediente le agregarían para dar consistencia a la arena. en ella modelaban cualquier artefacto que querían fabricar. En la arena se imprimía la forma modelo, se tapaba el cajón y por un orificio vertían la plata derretida. Cuando calculaban que se hubiera enfriado, desmontaban el cajón y aparecía la plata cuajada, teniendo la misma forma que el modelo. Lo quitaban del molde y lo perfeccionaban con lima y martillo sobre el yunque."
Pascual Coña "Memorias de un Cacique Mapuche"
"Pero todos los hombres ponían su orgullo en el arreglo de sus cabalgaduras. Tenían espuelas y estribos de plata y adornos de plata en las acciones; además cabezadas ataviadas de plata, provistas de colgantes del mismo metal. También tenían incrustaciones de plata en las barbadas y adornados los bocados en ambos lados con unos discos de plata. Las riendas eran targeadas con plata. Así relumbraban sus caballos cuando se dirigían a sus reuniones festivas. Todos estos adornos eran obra de los joyeros indígenas.)"
Pascual Coña "Memorias de un Cacique Mapuche" .
Economia.
Los ambientes en los que se desenvolvió la cultura Mapuche en Chile, permitieron el desarrollo de una agricultura en pequeña escala con cultivos de maíz, papa, quinoa, calabaza, habas y ají entre otros. La recolección de plantas silvestres, la caza y la cría de llamas y animales menores en el norte, y la pesca y recolección de mariscos en la costa, completaban los recursos alimenticios.
Al trasladarse a la Argentina, el pueblo Mapuche siguió practicando la agricultura, principalmente en Neuquén, así como también sus manufacturas tradicionales. Emplearon la madera para la confección de elementos de uso cotidiano. Se destacaron como orfebres y en la talabartería y el tejido. Estas actividades junto con el tráfico de ganado fueron la base de su subsistencia. A fines del siglo XVIII, los Mapuche controlaban los arreos de ganado que, partiendo de la pampa húmeda, trasladaban por los pasos neuquinos, para comerciar en Chile. La desaparición de los animales sueltos y la expansión de la frontera blanca, obligaron a los indígenas a apropiarse por la fuerza del ganado de las estancias, convirtiendo estos "malones" en su principal fuente de recursos.
Al trasladarse a la Argentina, el pueblo Mapuche siguió practicando la agricultura, principalmente en Neuquén, así como también sus manufacturas tradicionales. Emplearon la madera para la confección de elementos de uso cotidiano. Se destacaron como orfebres y en la talabartería y el tejido. Estas actividades junto con el tráfico de ganado fueron la base de su subsistencia. A fines del siglo XVIII, los Mapuche controlaban los arreos de ganado que, partiendo de la pampa húmeda, trasladaban por los pasos neuquinos, para comerciar en Chile. La desaparición de los animales sueltos y la expansión de la frontera blanca, obligaron a los indígenas a apropiarse por la fuerza del ganado de las estancias, convirtiendo estos "malones" en su principal fuente de recursos.
jueves, 29 de abril de 2010
Organizacion Social Mapuche.
La familia habitaba en un aposento pequeño, la ruca, de madera y paja. Los consanguíneos se agrupaban formando un "lov". El hombre podía casarce con cuantas mujeres le permitieran sus recursos. Los más ricos (ulmenes) poseían seis o más; pero la mayor parte se conformaban con dos o tres. La desproporción entre los sexos se producía por las guerras con los vecinos y entre sí y por la presa de las mujeres del vencido. Como todos los pueblos en su etapa ascendente de la evolución social, los araucanos sentían la necesidad de engendrar muchos hijos. Además, la mujer, lejos de ser una carga, constituía la fuente fundamental de producción. Cultivaban la tierra, tejían, algunas eran expertas alfareras y preparaban con gran destreza pieles y cueros. También elaboraban bebidas fermentadas, justificación de todas las reuniones y orgullo de los jefes de hogar. Los sacerdotes llamados machis solían, casi en su totalidad, ser mujeres y asociaban sus conocimientos del valor curativo de las plantas medicinales al poder de la hipnosis.
Era la primera mujer con que se casaba un mapuche (la unendomo), la real dueña del hogar, pues las siguientes le reconocían tal carácter, y su hijo mayor era el primogénito, aunque naciera después que los hijos varones de las otras. La unendomo quedaba libre en la viuedad, mientras que las demás mujeres formaban parte de la herencia del primogénito, o, si este no existía, del hermano mayor del difunto.
Era la primera mujer con que se casaba un mapuche (la unendomo), la real dueña del hogar, pues las siguientes le reconocían tal carácter, y su hijo mayor era el primogénito, aunque naciera después que los hijos varones de las otras. La unendomo quedaba libre en la viuedad, mientras que las demás mujeres formaban parte de la herencia del primogénito, o, si este no existía, del hermano mayor del difunto.
Organización Politica Mapuche.
Las instituciones sociales y políticas partían del "lov", la cuál era una reunión de parientes inmediatos. Eran habitadas por una familia amplia, es decir, el padre con sus esposas y los hijos con sus cónyugues, núcleo de casi 30 personas que reconocían la autoridad paterna, autoridad que heredaba el hijo mayor.
Los asuntos internos de la comunidad se discutían en los cahuines, reuniones de caciquillos, indios principales y todos los que estaban unidos por el totem (dícese de aliado y protector de la familia).
El "levo", institución que juntaba de 1.600 a 4.000 personas, comprendía varios grupos totémicos o cahuines que tenían un antepasado en común. Acataban la autoridad de tres jerarquías: el "ngentoqui" o "cacique", jefe militar; el "ngenvoigue" o "toqui", jefe civil para la paz, y el "voiguenvoe", jefe religioso. Los tres empleaban un hacha como emblema de mando, diferenciada en los colores. El ngenvoigue, toqui de paz, era generalmente el jefe hereditario descendiente del fundador, En el levo se tomaban medidas colectivas no sólo sobre problemas de carácter local, sino también sobre el acuerdo o discrepancia con otros levos, la paz y la guerra y la resolución de numerosos problemas, que le daban un carácter marcadamente político. Los acontecimientos sensacionales y las grandes calamidades naturales provocaban la reunión de varios "rehues", los "aillarehues" que formaban entre sí una tribu.
La guerra con los españoles dio a los airallehues gran importancia y creó, a la vez, otra institución, el "vutalmapu", o junta de airallehues, que al principio de ella era una reunión de carácter estrictamente militar.
A pesar del desarrollo adquirido por estas organizaciones, el pueblo araucano carecía prácticamente de cohesión política y social. Los grupos que había unido el peligro común, luego de transcurrido, se desbandaba.
La organización militar de los mapuches se había desarrollado, hasta la llegada de los españoles, en paralelo incremento a su evolución social. Reunidos en aillarehues, si los augurios eran favorables, se elegía el toqui, que, a su vez, escogía subjefes y oficiales.
Los asuntos internos de la comunidad se discutían en los cahuines, reuniones de caciquillos, indios principales y todos los que estaban unidos por el totem (dícese de aliado y protector de la familia).
El "levo", institución que juntaba de 1.600 a 4.000 personas, comprendía varios grupos totémicos o cahuines que tenían un antepasado en común. Acataban la autoridad de tres jerarquías: el "ngentoqui" o "cacique", jefe militar; el "ngenvoigue" o "toqui", jefe civil para la paz, y el "voiguenvoe", jefe religioso. Los tres empleaban un hacha como emblema de mando, diferenciada en los colores. El ngenvoigue, toqui de paz, era generalmente el jefe hereditario descendiente del fundador, En el levo se tomaban medidas colectivas no sólo sobre problemas de carácter local, sino también sobre el acuerdo o discrepancia con otros levos, la paz y la guerra y la resolución de numerosos problemas, que le daban un carácter marcadamente político. Los acontecimientos sensacionales y las grandes calamidades naturales provocaban la reunión de varios "rehues", los "aillarehues" que formaban entre sí una tribu.
La guerra con los españoles dio a los airallehues gran importancia y creó, a la vez, otra institución, el "vutalmapu", o junta de airallehues, que al principio de ella era una reunión de carácter estrictamente militar.
A pesar del desarrollo adquirido por estas organizaciones, el pueblo araucano carecía prácticamente de cohesión política y social. Los grupos que había unido el peligro común, luego de transcurrido, se desbandaba.
La organización militar de los mapuches se había desarrollado, hasta la llegada de los españoles, en paralelo incremento a su evolución social. Reunidos en aillarehues, si los augurios eran favorables, se elegía el toqui, que, a su vez, escogía subjefes y oficiales.
Division del pueblo Mapuche.
Los mapuches se dividían en diferentes grupos según el territorio que ocupaban:
Picunches (gente del norte). Estaban ubicados en el Pikunmapu entre los ríos Choapa e Itata. Desde el río Choapa hasta el río Maipo este grupo estuvo integrado en un momento de su historia al Imperio Inca.
Mapuche o araucanos propiamente tales según las crónicas de los realistas, protagonistas de la Guerra de Arauco. Otras fuentes los habrían designado también moluche o ngoluche (gente del oeste).
Huilliches (gente del sur). Entre el río Toltén y el canal de Chacao.
Cuncos. En el norte y este de Chiloé y en zonas aledañas del continente, muy semejantes a los huilliches.
Pehuenches, Ya en el siglo XVI este pueblo mapuche ocupaba las regiones montañosas a ambos lados de los Andes, a partir de ellos otros pueblos mapuche iniciaron la expansión mapuche mediante su avance a las Pampas y la Patagonia aculturizando a sus habitantes. Hacía fines del siglo XIX la región estaba poblada solo por tribus de cultura mapuche.
En el siglo XVII cuando la Guerra de Arauco se fue haciendo menos intensa el comercio entre mapuche y criollos aumento, los indígenas empezaron a criar ovejas y vacas que consiguieron en malones, lo mismo paso con el contacto con los pueblos de las pampas con los que comerciaban ganado y mercancías (principalmente la sal).El cruce de los pueblos mapuche a las pampas se intensificó a partir del siglo XVIII por las victorias sobre los tehuelches.
El contacto con los españoles fue el principal desencadenante de este proceso, los europeos ejercieron presión demografica sobre los mapuche que buscaron otro territorio para exportar la población sobrante. Fue el comercio con los criollos lo que motivo la conquista de otros pueblos para controlar las rutas comerciales. El ganado robado y la sal extraida en la pampa se vendían a los criollos de Chile y Buenos Aires, esto se logró gracias a otro aporte español, la introducción del caballo. Con el caballo los mapuche podían cruzar la pampa arriando ganado en relativamente poco tiempo; mientras que con el nuevo modo de vida ganadero los pueblos de las pampas también cambiaron su modo de vida, la población aumento lo que motivo los conflictos por los recursos entre las tribus rivales. Esto facilito la conquista y posterior aculturización por los mapuche. A partir del siglo XVI gracias al caballo los tehuelches iniciaron su expansión desde el sur extendiendo su cultura a toda la pampa hacia inicios del 1600, a mediados del siglo XVIII, sin embargo, ese proceso fue detenido por la llegada de los mapuche. La araucanización se caracterizo por la asimilación y mestizaje del pueblo conquistado y los araucanos de manera gradual, a través de varias generaciones.Hacia 1820 se produjo la mayor migración de mapuche a territorio argentino cuando cerca de 40.000 borogas cruzaron los Andes, producto de la Guerra a muerte entre realistas y patriotas en el sur de Chile.
Principales pueblos araucanizados:
Poyas (Incluyendo a los vuriloches), luego "poyuche" habitaban y sus descendientes habitan, principalmente en las zonas montañosas del sur de la provincia del Neuquén y noroeste de la provincia de Río Negro.
Huarpes que vivían en el Cuyo.
Puelche (En mapundugún: "Gente del este"), nombre que los mapuche daban a los het y a los tsonek "(patagones)" septentrionales, llamados en su propio idioma: genanken o gununakena.
Ranqueles (rangkülche: gente de las cañas), pehuenches e incluso"huincas" (caucásicos) principalmente a través de las cautivas tras los malones y en menor grado por hombres de con orígenes caucásicos (como los hermanos Pincheira, o como el coronel Baigorria). Los ranqueles, sobre todo en tiempos de Calfucurá fueron los principales protagonistas de las "Guerras contra el huinca" entre 1580 y 1880 en el actual territorio argentino.
Chonos. Al sur de Chiloé, fueron conquistados por los mapuche y se mestizaron con ellos.
Los mapuche llamaron a todos los tsonek (o según los españoles "patagones") con el nombre de chehuelche o tehuelche, palabra que se traduce por "gente bravía" debido a la resistencia que opusieron a la expansión mapuche al este de los Andes (Pire Mahuida -Montaña Nevada- en mapundungun). También les llamaron "auca" (rebelde, indómito; es decir, llamaron a los tsonek con el mismo apodo que antes parecen haber recibido los mapuche de los quechuas). Muchos autores incluyen a los tsonek como una parcialidad mapuche, pero otros consideran que las diferencias culturales (por empezar las idiomáticas) entre tsonek eran bastante importantes, del mismo modo, lo cierto es que la relación entre tsonek y mapuche fue constantemente belicosa (los tsonek septentrionales, superados en número y tácticas de combate, o debieron replegarse al sur ante la invasión mapuche al Comahue y región pampeana o quedaron aculturados); los tsonek hacia 1870 libraban feroces combates contra los mapuche en las proximidades del río Chubut, zona que fue el límite meridional de la expansión mapuche.
En el siglo XXI, las subdivisiones son ligeramente distintas. Los nombres están dados casi siempre desde el punto de vista de los mapuche de la IX Región chilena, principalmente de Cautín:
En la Argentina, el término mapuche es de uso general, con ocasionales distinciones entre las parcialidades.
No existen miembros del pueblo picunche, porque fueron completamente aculturados durante la Colonia (forman en gran medida uno de los substratos originarios de la población criolla de Chile), pero los mapuche usan el término es su significado literal, para referirse a una comunidad que habita más al norte que el hablante.
Huilliches en las provincias de Osorno y Chiloé. Los huilliches de Chiloé prefieren llamarse veliches a sí mismos y a su lengua.
En las provincias de Malleco y Cautín se usan los nombres nagche (gente de abajo) para los habitantes de la Depresión Intermedia y wenteche (gente de arriba) para quienes habitan en la Precordillera andina, pero estas denominaciones tienen una connotación territorial más que cultural.
Picunches (gente del norte). Estaban ubicados en el Pikunmapu entre los ríos Choapa e Itata. Desde el río Choapa hasta el río Maipo este grupo estuvo integrado en un momento de su historia al Imperio Inca.
Mapuche o araucanos propiamente tales según las crónicas de los realistas, protagonistas de la Guerra de Arauco. Otras fuentes los habrían designado también moluche o ngoluche (gente del oeste).
Huilliches (gente del sur). Entre el río Toltén y el canal de Chacao.
Cuncos. En el norte y este de Chiloé y en zonas aledañas del continente, muy semejantes a los huilliches.
Pehuenches, Ya en el siglo XVI este pueblo mapuche ocupaba las regiones montañosas a ambos lados de los Andes, a partir de ellos otros pueblos mapuche iniciaron la expansión mapuche mediante su avance a las Pampas y la Patagonia aculturizando a sus habitantes. Hacía fines del siglo XIX la región estaba poblada solo por tribus de cultura mapuche.
En el siglo XVII cuando la Guerra de Arauco se fue haciendo menos intensa el comercio entre mapuche y criollos aumento, los indígenas empezaron a criar ovejas y vacas que consiguieron en malones, lo mismo paso con el contacto con los pueblos de las pampas con los que comerciaban ganado y mercancías (principalmente la sal).El cruce de los pueblos mapuche a las pampas se intensificó a partir del siglo XVIII por las victorias sobre los tehuelches.
El contacto con los españoles fue el principal desencadenante de este proceso, los europeos ejercieron presión demografica sobre los mapuche que buscaron otro territorio para exportar la población sobrante. Fue el comercio con los criollos lo que motivo la conquista de otros pueblos para controlar las rutas comerciales. El ganado robado y la sal extraida en la pampa se vendían a los criollos de Chile y Buenos Aires, esto se logró gracias a otro aporte español, la introducción del caballo. Con el caballo los mapuche podían cruzar la pampa arriando ganado en relativamente poco tiempo; mientras que con el nuevo modo de vida ganadero los pueblos de las pampas también cambiaron su modo de vida, la población aumento lo que motivo los conflictos por los recursos entre las tribus rivales. Esto facilito la conquista y posterior aculturización por los mapuche. A partir del siglo XVI gracias al caballo los tehuelches iniciaron su expansión desde el sur extendiendo su cultura a toda la pampa hacia inicios del 1600, a mediados del siglo XVIII, sin embargo, ese proceso fue detenido por la llegada de los mapuche. La araucanización se caracterizo por la asimilación y mestizaje del pueblo conquistado y los araucanos de manera gradual, a través de varias generaciones.Hacia 1820 se produjo la mayor migración de mapuche a territorio argentino cuando cerca de 40.000 borogas cruzaron los Andes, producto de la Guerra a muerte entre realistas y patriotas en el sur de Chile.
Principales pueblos araucanizados:
Poyas (Incluyendo a los vuriloches), luego "poyuche" habitaban y sus descendientes habitan, principalmente en las zonas montañosas del sur de la provincia del Neuquén y noroeste de la provincia de Río Negro.
Huarpes que vivían en el Cuyo.
Puelche (En mapundugún: "Gente del este"), nombre que los mapuche daban a los het y a los tsonek "(patagones)" septentrionales, llamados en su propio idioma: genanken o gununakena.
Ranqueles (rangkülche: gente de las cañas), pehuenches e incluso"huincas" (caucásicos) principalmente a través de las cautivas tras los malones y en menor grado por hombres de con orígenes caucásicos (como los hermanos Pincheira, o como el coronel Baigorria). Los ranqueles, sobre todo en tiempos de Calfucurá fueron los principales protagonistas de las "Guerras contra el huinca" entre 1580 y 1880 en el actual territorio argentino.
Chonos. Al sur de Chiloé, fueron conquistados por los mapuche y se mestizaron con ellos.
Los mapuche llamaron a todos los tsonek (o según los españoles "patagones") con el nombre de chehuelche o tehuelche, palabra que se traduce por "gente bravía" debido a la resistencia que opusieron a la expansión mapuche al este de los Andes (Pire Mahuida -Montaña Nevada- en mapundungun). También les llamaron "auca" (rebelde, indómito; es decir, llamaron a los tsonek con el mismo apodo que antes parecen haber recibido los mapuche de los quechuas). Muchos autores incluyen a los tsonek como una parcialidad mapuche, pero otros consideran que las diferencias culturales (por empezar las idiomáticas) entre tsonek eran bastante importantes, del mismo modo, lo cierto es que la relación entre tsonek y mapuche fue constantemente belicosa (los tsonek septentrionales, superados en número y tácticas de combate, o debieron replegarse al sur ante la invasión mapuche al Comahue y región pampeana o quedaron aculturados); los tsonek hacia 1870 libraban feroces combates contra los mapuche en las proximidades del río Chubut, zona que fue el límite meridional de la expansión mapuche.
En el siglo XXI, las subdivisiones son ligeramente distintas. Los nombres están dados casi siempre desde el punto de vista de los mapuche de la IX Región chilena, principalmente de Cautín:
En la Argentina, el término mapuche es de uso general, con ocasionales distinciones entre las parcialidades.
No existen miembros del pueblo picunche, porque fueron completamente aculturados durante la Colonia (forman en gran medida uno de los substratos originarios de la población criolla de Chile), pero los mapuche usan el término es su significado literal, para referirse a una comunidad que habita más al norte que el hablante.
Huilliches en las provincias de Osorno y Chiloé. Los huilliches de Chiloé prefieren llamarse veliches a sí mismos y a su lengua.
En las provincias de Malleco y Cautín se usan los nombres nagche (gente de abajo) para los habitantes de la Depresión Intermedia y wenteche (gente de arriba) para quienes habitan en la Precordillera andina, pero estas denominaciones tienen una connotación territorial más que cultural.
Etimologia.
El nombre mapuche o mapunche significa "gente de la tierra" en su lengua, con alusión a las personas que reconocen su pertenencia e integración a un territorio. En algunas zonas, se usan ambos términos con leves diferencias de significado. Hasta el siglo XVIII, también habría existído entre los integrantes de esta etnia la autodenominación reche (verdadero hombre).
El nombre "araucano" deriva de Arauco, el nombre que para los españoles la tierra que habitaban, cuya etimología es incierta. Se ha postulado que "Arauco" podría derivar de una castellanización de la palabra mapuche Ragko, "agua gredosa", que los conquistadores habrían usado para los habitantes de un sitio llamado así y que luego se habría extendido a todos los restantes pueblos del área.; otra teoría es que procede de la la palabra quechua awqa, "salvaje" o "rebelde", "enemigo" o de palqu, "silvestre" y les habría sido dado por los incas o por los españoles, y según los cronistas, los incas ya habían denominado como purumauca a la población que habitaba el sur del río Cachapoal; y los españoles sólo adoptaron la denominación auca para referirse a ella.
Los mapuche rechazan el uso del nombre araucano, porque les fue otorgado por sus enemigos. La palabra awka fue adoptada por los mapuche con el significado de "indómito", "salvaje"o "bravo" y ellos mismos también la habrían aplicado posteriormente a los tehuelches.
El nombre "araucano" deriva de Arauco, el nombre que para los españoles la tierra que habitaban, cuya etimología es incierta. Se ha postulado que "Arauco" podría derivar de una castellanización de la palabra mapuche Ragko, "agua gredosa", que los conquistadores habrían usado para los habitantes de un sitio llamado así y que luego se habría extendido a todos los restantes pueblos del área.; otra teoría es que procede de la la palabra quechua awqa, "salvaje" o "rebelde", "enemigo" o de palqu, "silvestre" y les habría sido dado por los incas o por los españoles, y según los cronistas, los incas ya habían denominado como purumauca a la población que habitaba el sur del río Cachapoal; y los españoles sólo adoptaron la denominación auca para referirse a ella.
Los mapuche rechazan el uso del nombre araucano, porque les fue otorgado por sus enemigos. La palabra awka fue adoptada por los mapuche con el significado de "indómito", "salvaje"o "bravo" y ellos mismos también la habrían aplicado posteriormente a los tehuelches.
Ubicacion.
A partir de un lugar situado entre los ríos La Ligua y Aconcagua y hasta el sector norte de la Isla de Chiloe vivía en el sigo XVI el mayor conglomerado poblacional de Chile. Se trataba más de un millón de personas, que hablaban con ligeras variaciones dialectales, el Mapundungún. En dicha lengua se auto denominan Mapuche que significa gente de la tierra.
A la llegada de los españoles, estos fueron nominando distintos grupos de indígenas, hasta llegar al río Itata, donde se ubica la mayor cantidad de Mapuches, los que tenían como limite norte el rió Itata y como limite sur el río Tólten. Tres siglos de “Guerra de Arauco” corrieron su frontera norte hasta el río Biobío, demarcando la zona en que hoy todavía habitan la mayoría de los Mapuches.
Sus actuales integrantes se aproximan a la cantidad de 500.000 Mapuches los cuales están concentrados específicamente en las localidades rurales de la IX región (Región de La Araucana) y en la zona de Cautín, Además de encontrarse de norte a sur desde la provincia del Biobío hasta la zona de Chiloe.
En la IX región cuyos faldeos cordilleranos que llegan hasta la Argentina, vive una rama de este grupo que puede llamarse Mapuche Pehuenche formada por unas 1.200 personas.
En la zona de Chiloe, se mantienen aproximadamente unas 450 personas, y que serian Mapuche - Huilliche.
Los orígenes y comienzos del pueblo Mapuche presentan todavía varias interrogantes, por lo que se sabe, desde sus primeros contactos con los conquistadores españoles hasta nuestros días se concluye que poseían una gran cohesión social y adaptabilidad para superar deferentes crisis.
Si trazáramos una línea transversal entre Santiago y Buenos Aires, en todo el territorio que queda al sur de esta línea se observa una influencia Mapuche.
A la llegada de los españoles, estos fueron nominando distintos grupos de indígenas, hasta llegar al río Itata, donde se ubica la mayor cantidad de Mapuches, los que tenían como limite norte el rió Itata y como limite sur el río Tólten. Tres siglos de “Guerra de Arauco” corrieron su frontera norte hasta el río Biobío, demarcando la zona en que hoy todavía habitan la mayoría de los Mapuches.
Sus actuales integrantes se aproximan a la cantidad de 500.000 Mapuches los cuales están concentrados específicamente en las localidades rurales de la IX región (Región de La Araucana) y en la zona de Cautín, Además de encontrarse de norte a sur desde la provincia del Biobío hasta la zona de Chiloe.
En la IX región cuyos faldeos cordilleranos que llegan hasta la Argentina, vive una rama de este grupo que puede llamarse Mapuche Pehuenche formada por unas 1.200 personas.
En la zona de Chiloe, se mantienen aproximadamente unas 450 personas, y que serian Mapuche - Huilliche.
Los orígenes y comienzos del pueblo Mapuche presentan todavía varias interrogantes, por lo que se sabe, desde sus primeros contactos con los conquistadores españoles hasta nuestros días se concluye que poseían una gran cohesión social y adaptabilidad para superar deferentes crisis.
Si trazáramos una línea transversal entre Santiago y Buenos Aires, en todo el territorio que queda al sur de esta línea se observa una influencia Mapuche.
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